De la frustración también se aprende

La frustración permite enfrentar los obstáculos y dificultades de la vida diaria, brinda las herramientas necesarias para pensar y decidir lo que más conviene o lo que es ideal según cada situación. La psicóloga María Jesús Álava, de la Universidad Complutense de Madrid, comenta que la frustración es necesaria desde la infancia pues le permite al niño experimentar, descubrir e ir generando experiencias que en su juventud y etapa adulta le darán fortaleza e inteligencia para enfrentar la realidad y lo que se le presente en el futuro. Un niño al que no se le permite frustrarse se le quitan posibilidades para que experimente e interprete el mundo por sí mismo. Este puede ser un grave problema en la edad adulta porque será difícil que una persona al desconocer la frustración pueda combatirla y aprender de esta.

"La frustración nos hace más humanos y más inteligentes"

María Jesús

Se recomienda que la frustración se aborde desde el humor y que el fracaso se tome como un aprendizaje y se enfrente con un sonrisa, todo momento de frustración es una nueva oportunidad para hacer las cosas diferente. Al saber lidiar con la frustración las personas adquieren habilidades que les permiten ser auténticos y no dejarse manipular por las circunstancias o por otras personas. La frustración impulsa de una manera inigualable el proceso creativo, forma seres ingeniosos que saben resolver situaciones de estrés, eficaz y eficientemente.

La frustración debe durar tan solo un instante y es necesario que mantengas tu enfoque en lo que quieres lograr así como tener la certeza de que eres capaz de culminar tus proyectos.

ALRIM

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